Calentar antes de jugar al golf

El Golf es un deporte que requiere mucho tiempo, tanto para dominar la técnica como para jugar unos hoyos.

Se dice que es un deporte de poco riesgo, pero cuando hay lesiones éstas suelen ser de carácter grave.

Para practicar este deporte hay que tener una buena condición física y sobretodo una buena tonificación muscular.

Hacer estiramientos y calentamiento es muy importante para intentar evitar en la mayor medida de lo posible futuras lesiones.

Un buen calentamiento puede durar unos 15 minutos, y es recomendado llevar un orden, dando preferencia a los ejercicios de elasticidad, movilidad articular y coordinación general.

Ejercicios básicos de calentamiento para jugar al golf

Antes de coger un palo, es recomendable caminar a buen ritmo durante varios minutos y a la vez ir activando las partes del cuerpo que más van a trabajar durante el juego, los brazos, haciendo una serie de movimientos específicos con ellos:

• Mover ambos brazos a la vez hacia delante y hacia atrás
• Mover un brazo hacia arriba y el otro hacia abajo alternativamente
• Hacer círculos con los hombros (hacia arriba, hacia delante, hacia abajo y hacia atrás)

Tras esta serie de ejercicios, ya parados, hacer estiramiento básico de miembros superiores (hombro, tríceps, musculatura extensora de antebrazo, musculatura flexora de antebrazo), el tronco y finalmente, miembros inferiores (gemelos e isquiotibiales, cuádriceps, aductores).

Con estos sencillos ejercicios nuestro cuerpo estará mejor preparado para comenzar a jugar y prevenido de sufrir incómodas lesiones que podrían retirarnos del golf durante una buena temporada.

Jugar al golf con una mala técnica puede llegar a producir molestias, dolores o importantes lesiones cuya única solución sea el tratamiento quirúrgico, por lo cual, es imprescindible que tanto el “swing” como la técnica se realicen de manera muy precisa.

Las lesiones más frecuentes tratadas entre los golfistas son:

• Dolores de hombro, espalda y rodilla
• Tendinitis de codo (codo de golfista o epitrocleitis)
• Hormigueos y pérdida de sensibilidad en las manos (síndrome del túnel carpiano)